Tenía mucho tiempo que no me pasaba algo por el estilo, y de hecho ya lo había olvidado, pero supongo que es algo que no se puede evitar, ésto es el prejuicio a algún género del anime. Seguramente se preguntan ¿Cómo es ésto? Pues es así de simple, cuando conozco a alguien es muy común que pregunten ¿Y qué te gusta? Rápidamente respondo que me gusta escuchar música, pero hasta ahí le dejo, puesto que si me pongo a explicar el tipo, no me entenderán; obviamente la vida no es sencilla, y dar una respuesta tan escueta deja muchas dudas, así que al fin preguntan ¿Y qué género?, sin tener miedo a responder ni a que me digan algo digo con orgullo: Música de anime.... y es ahí dónde todo comienza.
Es fácil explicar lo que me gusta, bueno relativamente fácil, porque basta con decir que son "Música de las caricaturas", ni siquiera la palabra anime puedo usar porque realmente no lo entienden a qué me refiero; después me dicen "Ah, como de Candy Candy/Dragon Ball/Sailor Moon" (depende de la generación y género que gusten es la referencia que me dan) y digo que sí, ante que al menos tienen la noción de algún anime, aunque de forma inconsciente.
Algunas ocasiones me ha pasado algo mucho "mejor", ya que empiezan a decirme "Ah, me gusta" o tal vez un "Ah, yo también veo anime", porque sí, me ha pasado que como que se hacen el loco para no demostrar su gusto por algo así como para aparentar ser "normal". Yo en lo particular no tengo miedo de decir: Mi nombre es tal, tengo 25 años, soy programadora, me gusta la tecnología, leer, escuchar música, escribir y adoro el anime.
La buena noticia es que en ésta época, el gusto por el anime ya no cae de sorpresa, sí, tengo que explicar más o menos de qué va, pero ya no es así como de que "Eres un rarito", porque antes, cuando era niña (momento para decir algo como ya llovió, o aullar por la lejanía de los años a los que me refiero) lo más común era que me preguntaran por ejemplo la novela de las 4 de la tarde, que es el horario en el que se transmiten novelas infantiles, por decirlo de alguna forma.
¿Y qué contestaba yo? Pues que no sabía ni de qué hablaban, que yo estaba entretenida viendo Sailor Moon, Saint Seiya (En ese entonces caballeros del zodiaco), Slayers (los justicieros), Ranma 1/2, Super Campeones, entre otros tantos que me encantaban ver y, adivinen qué pasaba, me tiraban de loca por gustarme algo "fuera de lo común".
Para éste punto, tal vez más de uno se sienta identificado, o tal vez fui la única a la que la trataron de ésta forma tan singular, no lo sé.
Años después descubrí el mundo de los fanfictions, al principio pensé que eran de verdad, ideas del autor que jamás se hicieron anime, pero investigando un poco salí de mi propio error viendo que eran historias creadas por fans para deleite de otros fans, hasta aquí todo bien. Otros años pasaron y, una amiga, me introdujo en el mundo que, hasta la fecha, sigue siendo mi género favorito a pesar de lo que me digan, me estoy refiriendo al yaoi.
Éste género no es del agrado de muchos, sin embargo tiene un no-sé-qué, que me atrae a sobremanera, tal vez sea el hecho de que el amor entre ellos casi nunca es fácil, o porque los dos chicos siempre son muy guapos (yo opto por la última opción), pero lo que sí sé es que realmente no hay nada de malo en verlos, es como a quien le gusta el género yuri, nada más que son hombres.
Con éste nuevo gusto y los fanfictions nació en mi el deseo de crear mi propia historia, realmente no lo hice de buenas a primeras, creo que tardé alrededor de cinco años en intentar crear un fanfiction y otro año más en publicarlo, pero para mi sorpresa me fue muy bien, sigo estando orgullosa de mi primera historia a pesar de que es un asco, simplemente es por el aprecio que le tengo que lo conservo.
Después de ésto, a una persona "especial" le comenté lo que hacía, me refiero a los fanfics, y según que me comprendía y me preguntaba que cómo iban mis escritos, por suerte o desgracia me enteré que era pura pantalla ya que SIEMPRE jugaba con la palabra yaoi, decía aoi, ayoi, yahoo, lo que sea, siendo que sabía muy bien el género, digamos que pretendía ser un otaku, pero se quedaba en eso, puro intento de serlo, y no es que desprecie a quien lo intenta, sino que se burlan en el proceso.
La vida que decidí, bueno decidimos llevar, no es de ver sólo caricaturas, como suelen decirle, es un conocimiento general del mundo nippón, por ejemplo, si dicen en un anime que la historia transcurre en el periodo Edo mínimo nos damos una idea de qué fechas se tratan, o bien, cuando decimos "kawaii", "gomen nasai", "domo arigatou", quieran que no, ése es otro lenguaje, es decir, ya estamos fuera del clásico inglés y español.
Ahora, qué sobre de que somos unos infantiles al ver todavía lo que vemos, que yo sepa los Simpson no son una caricatura para niños, no todas las caricaturas lo son, sino porqué crear Padre de Familia o un Papá Norteamericano, el que sea una animación no implica que sea para niños, para muestra vean el Ecchi, ni siquiera necesitamos irnos tan lejos como para decir que vean el Hentai, que ahí sí para que vean, ese en definitiva no es para que el más pequeño de la casa lo vea.
Otra cosa son las "figuritas" que compramos, no son cualquier cosa, de hecho la mayoría cuestan un ojo de la cara y la mitad del otro, son como quien colecciona figuras de las guerras de las galaxias, ¿a poco si se les perdiera una no sentirían que les han robado el alma? Es exactamente lo mismo. Tenemos una mini-inversión en esas hermosas creaciones.
Sí, gastamos montones de dinero en éstas cosas, somos algo cerrados, convivimos más que nada con los "nuestros", pero somos ingenieros/licenciados/psicólogos/arquitectos/maestros/dibujantes o cualquier cosa que se les ocurra, no somos un bicho raro o algo por el estilo y, les aseguro que si nos hablan, no mordemos (bueno yo sí, pero ese es punto aparte) ni mucho menos les vamos a pegar un virus, solamente compartimos el interés que tenemos con alguien más, así como nos hablan de futbol, nosotros hablamos de anime.
Básicamente ésto es lo que tengo que repetir cada vez que conozco a alguien que no sabe ni de lo que estoy hablando, del yaoi es un poco más incómodo pero al final digo algo así como "es mejor que no lo sepas", pero en general, amo ser otaku y tal vez lo sea hasta que me muera, porque les enseñaré a mis hijos el mundo que descubrí, un mundo nuevo en el que se pueden hacer nuevos amigos muy buenos.
En definitiva qué difícil es ser un otaku....pero no lo cambio por nada.
Matta Ne
Respuestas a "No es fácil ser un otaku"